LA IMPORTANCIA DEL RESPETO. Cómo ayudar a nuestros hijos/as a llevarlo a cabo

No pegues, le dice un padre a su hijo mientras le pega
No grites, le dice un padre a su hijo mientras le grita
Se respetuoso, le dice una madre a su hija después de poner verde a la vecina
No le quites los juguetes al niño, le dice una madre a su hijo mientras le quita el juguete de sus manos
Hay que compartir, le dice una madre a su hijo mientras le quita el juguete

Y así podríamos estar largo y tendido…ejemplos que día a día ocurren…y que podemos evitar.
Para empezar este post me gustaría recordar primero el significado de la palabra RESPETO y por tanto  RESPETAR y de este modo otorgar la palabra RESPETUOSO/A
RESPETO: del lat. respetus «atención / consideración»
Miramiento, consideración, deferencia

RESPETAR:
Tratar con respeto o consideración a una persona/cosa por cualidad, situación, circunstancia.

RESPETUOSO/A: 
Que implica respeto o consideración hacia alguien/algo.
Una vez tenemos claro estos aspectos y siempre bajo los principios Montessori, porque esto es un blog dedicado al aprendizaje Montessori «Aprendiendo con Montessori», hablaremos de la estrecha relación que existe en esta palabra y en Montessori. Evidentemente es necesaria y se utiliza en todas aquellas pedagogías llamadas respetuosas, incluyendo la educación Montessori y, por supuesto, la VIDA EN SOCIEDAD. 
En un ambiente Montessori el respeto forma parte del mismo, considerándose de tremenda importancia. Gracias a él, el microclima, la microsociedad que se crea en dicho ambiente, los niños son capaces de lidiar con problemas y resolverlos de la forma más pacífica posible.

Estadísticamente la educación Montessori es una de las mejores para la resolución de conflictos. Los niños aprenden de manera natural, gracias al ambiente y la guía a: respetar turnos, respetar los comentarios de sus compañeros, respetarse a sí mismo y respetar los materiales y la situaciones que se crean allí.

Gestionar los conflictos de manera respetuosa es algo para lo que la educación tradicional no nos ha preparado y por ende arrastramos ya de adultos en nuestra mochila de infancia, que hemos adquirido gracias a nuestra mente absorbente (puedes leer más AQUÍ sobre mente absorbente). Que por supuesto resurgen cuando, como adultos, nos enfrentamos a las situaciones. 
Siendo conscientes de esto, es importante saber que el RESPETO se aprende. Aprendemos a vivir en sociedad, y esto lo hacemos desde el momento en que estamos vivos, desde el momento en que nacemos. Esto no quiere decir que de adultos no podamos aprender a ser RESPETUOSOS. Sí podemos y debemos, por nuestros hijos, que son el futuro de la sociedad. Y del mismo modo mostrar RESPETO a nuestros hijos día a día en todas las situaciones.
Otra de las cosas que debemos tener en cuenta es que COMPETENCIA Y RESPETO no van de la mano, son totalmente opuestas. Si nos referimos a la competencia con los demás, es decir, yo soy más que tu, yo soy menos que…y por ello te ridiculizo con mis comentarios, te comparo con los demás, etc, etc. NO. Esta competencia trae lucha de poderes y GUERRA. La COMPETENCIA SANA es la que uno mismo se tiene con uno mismo, es decir, intentar superarnos día a día con nosotros mismos, sin necesidad de mirar el zapato de los demás. Esto es un aprendizaje también difícil…y si queremos dar ejemplo a nuestros hijos debemos tener presente día a día: nuestra forma de actuar, de mirar, de hablar, etc, etc.
Para fomentar el respeto en los niños hay herramientas que nos pueden ayudar, pero para ello, lo primero es TRABAJARNOS A NOSOTROS MISMOS. 
¿QUÉ DEBEMOS EVITAR COMO ADULTOS EN NUESTRO DÍA A DÍA?
1-Realizar burlas Las burlas nada tienen que ver con la parte cómica, menosprecian, infravaloran. Pueden considerarse un insulto.

2-Ser incongruentes con lo que decimos y después hacemos No podemos decir que respetamos a nuestro hijo y que nuestra crianza es basada en el respeto cuando a los cinco minutos estamos siendo unos irrespetuosos con nuestro vecino/a.

3-Compararnos a nosotros mismos con los demás, comparar a nuestros peques con los demás.
4-Criticar destructivamente Las criticas que se basan en machacar a los demás no ayudan a crecer ni a los demás ni a uno mismo.
¿QUÉ PODEMOS HACER?
1-Ser congruentes y coherentes con lo que decimos y hacemos. Estar seguros de que lo que vamos a decir está estrechamente ligado con lo que hacemos o vamos hacer. No basta con decir que llevamos a cabo una crianza respetuosa, para ser congruentes, debemos practicarla no solo con nuestros hijos sino con toda la sociedad.

2-Empatizar. Ser conscientes de que todos tenemos sentimientos, y que nuestras palabras pueden herir. Por tanto debemos intentar expresarnos desde el mayor respeto posible.

3-Lógica. Si tenemos un problema con alguna persona o situación debemos expresarlo a la persona implicada. De nada sirve actuar a las espaldas. Lo único que conseguimos con esto es avivar el fuego y el calor.

4-Bondad. Puede sonar muy «happy flower» pero es necesario que nos amemos a nosotros mismos para poder/saber amar a los demás. Un poquito de cuidado interior siempre será la mejor herramienta.
5-Escuchar. Para aprender a decir también hay que aprender a escuchar. Si uno no toma tiempo para escuchar o no está dispuesto a escuchar, el canal de la comunicación respetuosa se corta.

6-Cerebro integrado. Como decimos en disciplina positiva si tienes un mal día y la parte racional se ha esfumado, tu cerebro está expuesto a que tus actuaciones no sean respetuosas ni contigo ni con los demás. Así que tomarse un tiempo positivo, para uno mismo, hace ver las cosas desde otra perspectiva para tomar aliento y hablar o decir, ahora sí, las cosas desde el respeto.

7-Critica constructiva. Que lo que vayas a decir sirva para algo. Como decía Socrates tiene que pasar por el triple filtro:
1. ¿Estás absolutamente seguro de que lo que vas a decir es verdad?
2. ¿Es bueno lo que me vas a decir?
3. ¿Es útil para mi?
Si no pasa estos tres filtros: lo que me vas a decir no sabes si es verdad, no sabes si es bueno ni si me va a ser útil para crecer…entonces ¿para qué lo vas a decir?
El mundo de la ma/pa-ternidad es de por sí dificil y encima entre nosotros, los adultos, no nos lo ponemos nada fácil. Con nuestra mochila a cuestas somos capaces de llegar a ser incongruentes con lo que decimos que somos y lo que hacemos, a veces no nos damos cuenta, otras veces se apodera la envidia, el estrés, y muchas otras cosas. Decimos que somos respetuosos con nuestros hijos pero ¿Cómo podemos serlo si no somos capaces de dar ejemplo cuando tenemos a la vecina al lado y no la estamos respetando? Cuando se nos escapa un prejuicio, una etiqueta, un insulto, infravalorando su trabajo, con un comentario irrespetuoso…Es importante mostrar respeto a nuestros hijos,sin duda, pero para que esto se de, también debemos empezar a respetar a los demás.

Cada familia decide cómo educar, cada persona decide qué decir, cada uno de nosotros somos dueños de nuestras palabras, sí, pero a veces se nos olvida que vivimos en sociedad, y que no solo importa estar bien con uno mismo sino, también, con los demás. 

Cuando abrí el blog no sabía la repercusión que iba a tener. No lo sabía. Igual que tampoco sabía que habrían comentarios inoportunos, irrespetuosos e ilógicos, o lo que es lo mismo críticas destructivas. No por nada en especial, sino porque, incrédula de mí, pensaba que el respeto primaria, ante todo, en este mundillo…ya que el blog se llama «Aprendiendo con Montessori» y la educación Montessori es ante todo respetuosa. Pero así como hay críticas destructivas también las hay constructivas y estas son las que realmente nos llenan, las que intento que, personalmente, me ayuden a crecer como persona. Comentarios ofrecidos desde el respeto, la educación y la empatía y dirigidos en primera persona hacía a mí. Y todo este rollo lo cuento con el cerebro integrado (que así lo llamamos en Disciplina positiva 😉 ) lo cuento porque tal vez tú que estás leyendo también puedes estar cansada/o de los comentarios que recibes, de las incongruencias que a veces presentamos las personas y más en el mundo de la crianza…(es triste pero cierto) y en este caso te animo a que respondas con la mejor herramienta EL RESPETO. Estoy convencida que con esta palabra dándole el sentido real que merece podemos cambiar las cosas y evitar otras tantas. Hazlo por tí, por ser consciente y congruente con lo que dices y haces, dándole valor a tus palabras. Hagámoslo por ellos…por los niños, que serán el futuro de esta sociedad y que tendrán que lidiar con problemas que será mejor que los resuelvan con una buena caja de habilidades sociales sanas y respetuosas. Por darles un buen ejemplo, el nuestro. Cualquier opción que decidas, callar o hablar que sea siempre RESPETUOSA.
Sin ir más lejos…Mahatma Gandhi según circula por las redes, no se si será cierto o no, pero me ha parecido una anécdota muy interesante, sufrió este tipo de ofensas irrespetuosas. Gandhi tuvo que sufrir a un profesor irrespetuoso. Y encontró la forma respetuosa de afrontar esas ofensas. Podéis ver un vídeo cortito sobre esta historia en youtube AQUÍ , que es el que vi yo. Lo dejo resumidito aquí bajo porque merece la pena 😉 
-Profesor «un puerco y un pájaro no se sientan a comer juntos»
-Gandhi «esté usted tranquilo, yo me voy volando»
– Profesor » Gandhi si usted se encuentra con dos bolsas y dentro está la sabiduría y el dinero  ¿Cuál de las dos se lleva?»
-Gandhi «El dinero, por supuesto»
-Profesor -sonrisa de listillo- «yo en su lugar hubiera escogido la sabiduría ¿no le parece?»
-Gandhi «Cada uno toma lo que no tiene profesor»
-Profesor -le escribe a Gandhi en su hoja de examen- IDIOTA
-Gandhi -coge la hoja la mira y se sienta y vuelve al profesor- «profesor usted me ha firmado el examen pero no me ha puesto la nota del examen…
«A veces la gente intenta hacernos daño con ofensas que ni siquiera nos hemos ganado. Pero solo nos daña el que puede (porque le dejamos) no el que quiere. Si permites que una ofensa te dañe, lo hará. Pero si no lo permites la ofensa volverá al lugar de donde vino»
Si alguna vez te has sentido así o conoces a alguien que pueda sentirse así y piensas que este post puede ayudar abrir los ojos a alguien, te animo a que lo compartas. Desde el respeto todo tiene más sentido. Desde el respeto le ofrecemos el mejor ejemplo de vida a nuestros hijos para el día hoy y el día de mañana. Empecemos por nosotros. PREDICA CON EL EJEMPLO, EL RESPETO EMPIEZA EN TÍ.
Muchas gracias por leernos, por todos vuestros mails alentadores, de apoyo, de consulta, por todos vuestros mails con criticas constructivas que nos hacen crecer. Y por seguir este humilde blog, donde detrás hay una persona, una familia, igual que vosotros, igual que la vuestra, con sentimientos, que se equivoca y que intenta aprender de los errores, con ganas de cambiar las cosas a mejor. Ya sabéis que podéis encontrarnos en facebook o instagram. Continuamos APRENDIENDO CON MONTESSORI con este ESTILO que nos caracteriza. Así que si os gusta estáis más que invitados a comentar, a seguir con nosotros creciendo como madres/padres/profes/tios/tias/abuelos/abuelas y a seguir equivocándonos juntos viendo el error como una puerta para el aprendizaje. Y sin duda doy por supuesto que a quien no le guste tenga plena libertad de no seguirnos y respetarnos. ¡¡Hasta pronto!!

5 respuestas a «LA IMPORTANCIA DEL RESPETO. Cómo ayudar a nuestros hijos/as a llevarlo a cabo»

  1. Cuánta verdad hay en el post. Yo soy madre de tres hijos pequeños todos y el estres muchas veces me puede. Intento educarles a los dos mayores de 3.5 y 2 años con respeto, pero es verdad que a veces termino gritando y cuando eso ocurre automáticamente las niñas reaccionan con la misma violencia, quisiera saber cómo poder controlarme para educar en positivo… Quizás un poquito de spa y relax no vendría mal. Gracias por el blog.

    1. Hola Maria, gracias por comentar. Totalmente de acuerdo, cuando uno no descansa el cerebro se destapa y ya no está integradito. Y las neuronas espejo actúan y sin darnos cuenta nuestros pequeños están haciendo lo mismo que nosotros…y más sabiendo que su cerebro tarda alrededor de 25 años en llegar a integrarse…así que como bien dices un spa, relax, tiempo para nosotros es primordial, y sobretodo no senirnos culpables por tomarnos ese tiempo tan necesario. Nos devuelve a la tierra, a poder razonar. Si me permites te recomiendo el libro de Jane Nelsen de Disciplina Positiva para preescolares tiene herramientas positivas muy interesantes. Y si alguna vez puedes hacer un taller de familias de disciplina positiva, son muy reveladores 🙂 Un abrazote y gracias a ti por leer

  2. Enhorabuena por este post, ya era hora de que alguien escribiera sobre esto, pues sí es verdad que mucha gente se dice super respetuos@ con su hij@ pero luego con el adulto que está al lado es todo, menos respetuoso, y así no se puede ser porque, como tú has dicho, los niños aprenden con el ejemplo. Un abrazo

  3. Muchas gracias por todas las lecturas que proporcionas. Te platico que en la escuela donde trabajo algunas las usamos para lectura de escuela para padres.

  4. Estoy muy interesada en el sistema montessori.
    Mi peque de 23 meses tiene un potencial increíble..pero me temo que tanto su padre como yo no hemos sabido estar a la altura de las circunstancias.
    Le hemos limitado mucho a lo largo de estos dos años,por falta de información, de no saber como sobrellevar ciertos momentos..por querer sobreprotegerlo, ayudarlo…hemos creado una personita bastante dependiente, aparte de lo demandante que siempre ha sido.
    Siempre necesita que yo esté a su lado, para jugar, para ver un poco de tv. Para hacer actividades…o para hacer nada simplemente.
    Cuando no consigue lo que desea se pone incontrolable, grita, patalea, y tiene un especial interés por partir y tirar cosas al suelo.
    Cuento que ha tenido a mano..cuento que ha roto..al igual que otros objetos.
    Le hablo, le explico que si hace esas cosas la consecuencia es que no podrá jugar, leer, o utilizar (libro,juego etc)nunca más, porque lo habrá roto.
    Pero no le importa e insiste.
    Hace lo mismo con el alimento, agua y todo lo que pille a mano.
    En momentos de tensión he perdido la paciencia, por frustración y le acabo gritando o diciéndole que estoy triste y que no puedo seguir hablando con él y me marcho a otra habitación, pero él me sigue, me da un beso y al poco tiempo vuelve a lo mismo…romper..dar patadas…golpes…
    Me siento agotada mentalmente. No sé cómo solucionar esto.
    Estoy adaptando nuestro hogar al sistema montessori, pero sin buenos resultados, o tal vez si y yo no lo aprecio…
    Un ej. Se sube en su banco para colaborar con la preparación del almuerzo, todo va bien, hasta que comienza a estrujar los alimentos, dar golpes con el cuchillo, tirar todo al suelo a manotazos…le digo que no podemos continuar si él lo hace así porque puede hacerse daño. Que cuando se calme lo haremos…su reacción es mucho peor, todo acaba tirado, pierdo la calma, el grita porque quiere seguir en lo mismo..y acabamos disgustados. Yo haciendo la comida sola y él tirando sus juguetes por el salón.
    Qué puedo hacer al respecto?
    Decir que al igual que ocurre esto, también es cariñoso, le gusta participar en las tareas cotidianas, la música, cantar(con sonidos, aún no habla)..aunque casi todo acaba como te dije anteriormente..a golpes o roto.:(
    En algo estamos fallando y mucho…mi bolsa de la culpa está a rebosar…
    Gracias por leer éste tostón..necesitaba desahogarme un poco.
    Enhorabuena por tu blog pero sobre todo por tu labor como madre.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *