Uno de los materiales que podemos encontrar en un ambiente Montessori es este Arco Romano. Un Arco que sin duda no sirve para apilar o construir unicamente sino que va más allá buscando el equilibrio y la gravedad. Y no solo eso sino que además podemos introducir este material sensorial dentro de la historia pues nos plantea muchas curiosidades sobre la época romana y la función en este caso de un arco.
Como todos los materiales Montessori el niño es capaz de autocorregirse sin necesidad de un adulto pues lleva ese control de error que todos los materiales Montessori llevan.
Sobre este material cabe destacar que es necesario que se construya de la manera correcta porque solo de esa forma se logrará realizar el arco y que éste desafie a la gravedad con tal solo quitar el soporte ¡voilà! comprobaremos si el arco se sostiene y sin duda este momento es muy emocionante.
Con este material también podemos trabajar vocabulario pues cada elemento de construcción recibe un nombre concreto. El arco de medio punto está compuesto por una dóvela central, dos dóvelas Basal y las dóvelas intra y extradós. Todos estos elementos trabajan comprimiendo todos sus puntos haciendo que se cree este «mágico» hallazgo que cuando se quita el soporte ninguna de las piezas cae si se ha puesto correctamente.
Un material que a simple vista parece sencillo pero que trae consigo grandes aprendizajes. Muchos me preguntáis dónde conseguir materiales, este en concreto, el que véis en las fotos es de Alupé. Y podéis encontrarlo aquí.
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