Esta semana contamos en nuestra sección de «Tour por casas de Inspiración Montessori» con Tania del blog «una mama novata» que podréis encontrar en instagram y en su blog. Hoy nos abre las puertas de su casa y la de su familia para que podamos ver cómo la han adaptado a las necesidades del peque y de todos.
Nuestra casa no es una casa de catálogo. En ella vive un niño de 3 años, dos adultos, dos gatos y un perro. Nos mudamos hace poco y aunque aún estamos en periodo de reformas, amueblar y reformar, todo en ella está siendo elegido para fomentar la convivencia y la comodidad de toda la familia.
Uno de los puntos más importantes para nosotros es que el peque pueda moverse con libertad y autonomía dentro de ella. Por eso, empezando por la entrada, todos los muebles son prácticos y todos está a su altura y es accesible. Un banco con zapatero y armarios laterales nos permite descalzarnos y guardar los abrigos a toda la familia.
Como vivimos con gatos las estanterías bajas no eran una buena opción para nosotros, ya que ellos se esconden en todos los rincones y terminan desordenando todo. En lugar de ello, optamos por módulos de poca altura con puertas sin cierre que el peque puede abrir y cerrar fácilmente para acceder a sus calcetines de andar por casa, a sus zapatos y a su mochilita.
En el salón optamos por el mismo sistema. Un mueble sencillo y bajo, con cajones deslizantes, donde él guarda sus puzzles y sus juegos de mesa. Nos parecía justo que él también tuviera su propio espacio dentro de la estancia de la casa donde más vida en familia se hace. Así que reservamos los cajones bajos para los materiales de juego que en casa utilizamos para pasar tiempo juntos.
Nosotros colocamos nuestras cosas en la estructura aérea del mueble, para los que escogimos puertas opacas. Ahí están nuestros libros y otras cosas. Pensamos que si hay algo que el peque no va a poder coger, ¡mejor que esté fuera de su alcance y de su vista!
Colocamos una lámpara con interruptor sencillo y graduable a su altura, para que no tuviera que usar una banqueta para encender y apagar las luces del salón, cuyos interruptores están un poco más altos que los del resto de la casa.
Preferimos ganar espacio para que pudiera practicar juegos de movimiento en casa a tener dos ambientes dentro del salón. Por eso escogimos una mesa enorme de centro graduable en altura para adaptarse a las actividades de toda la familia. En ella jugamos, pintamos, hacemos actividades y también comemos.
Es de vidrio templado, un material resistente y fácil de limpiar. Así ni las manchas de pintura ni los arañazos son nunca un problema. ¡Y el sofá tiene un tapizado a prueba de manchas y uñas de gato!
En nuestra casa no hay prácticamente nada que se pueda romper. Los objetos de cristal o de cerámica han sido sustituidos por elementos naturales como el mimbre, el bambú o las piñas, con las que el peque juega muchísimo. Y hay cuentos por todas partes. 🙂
En su habitación adaptamos de nuevo el ambiente Montessori a la convivencia con gatos. Escogimos muebles a su medida, sencillos y de madera natural, con rieles para cubos extraíbles en lugar de cajones. De esta forma el peque organiza y accede fácilmente a sus diferentes tipos de materiales de juego y experimentación, sin que los gatos lo desordenen todo constantemente.
En un extremo del cuarto hay una pequeña mesa de madera con dos sillas chiquititas y un dispensador con rollo de papel continuo para sus dibujos y manualidades. Las estanterías para cuentos le permiten elegir el que quiere “leer” por su portada, en lugar de hacerlo por el título de su lomo, ya que todavía no sabe leer.
Escogimos la cama Kura de Ikea por su versatilidad. En una primera etapa permite tener el colchón directamente apoyado sobre el suelo, después se puede elevar a la altura de una cama normal y, por último, se convierte en una litera en la que todo el espacio inferior está despejado. Así más adelante se recupera todo el espacio que actualmente ocupa su cama y se puede crear bajo la litera una zona de relax, de juego, estudio, experimentación o lectura.
Como la habitación ya tenía un armario empotrado y estaba amueblado por dentro, lo que hicimos fue colocar toda su ropa en los cajones inferiores, a los que el niño llega sin problema. Como sus prendas son pequeñas, en ellos caben perfectamente pantalones, sudaderas, jerséis y camisetas. Las camisetas están dobladas a modo de “rollito” para que pueda encontrar la que más le gusta sin problema y sepa también cómo guardarlas fácilmente.
Vivimos en un ático y todas las ventanas de la casa dan a la terraza, así que no hicieron falta barrotes para prevenir accidentes, pero sí instalamos mosquiteras para evitar tentaciones tanto en los gatos como en el niño.
En la cocina una simple banqueta y un cajón a su altura le permiten ser autónomo. El peque colabora en las labores domésticas así que tiene sus propios útiles de limpieza adaptados a sus manitas y también sus propios cubiertos, vajilla, peladores y cuchillos. Desde que aprendió a cortar plastilina con un cuchillo de plástico, utiliza un cortador de verduras para cortar alimentos en la cocina. ¡Las patatas y la fruta casi siempre las corta él! También le encanta cocinar pasta y hacer tostadas.
En el cuarto de baño prescindimos de la tradicional banqueta e instalamos un pequeño panel con ventosas sobre el bidé. De esta forma el peque tiene a su altura un grifo de agua, una toalla pequeñita para las manos y la cara, un dispensador de gel y todos sus útiles de aseo. Esto le permitió aprender a lavarse la cara y las manos, cepillarse los dientes, peinarse y echarse colonia él solito desde que aprendió a mantenerse en pie por sí mismo.
Adaptar una casa a las necesidades de un peque no nos ha resultado económicamente costoso. Basta con aplicar el sentido común y observar al niño con empatía. Ninguno de nuestros muebles o accesorios son caros y todos ellos pueden ir trasladándose de sitio o reutilizarse en un futuro a medida que el desarrollo físico y madurativo del niño vaya marcando nuevas etapas.
Muchas gracias Tania por contarnos tu experiencia. Si no queréis perderos la casa de la semana que viene os animo a que estéis atentos a nuestro facebook e instagram.
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